Las piedras
El distraído tropezó con ella.
El violento la usó como arma.
El emprendedor la utilizó para construir.
El caminante cansado, la usó como asiento.
Para los niños fue un juguete.
Para los romanos fue una carretera.
En muchas culturas las colorearon convirtiéndolas en arte.
Drummond hizo poesía con ella.
En Stonehenge se convirtieron en un lugar sagrado.
David mató a Goliat con una piedra.
En la isla de Pascua vigilaron del enemigo.
En Egipto cuidaron el cadaver del faraón.
Miguel Ángel extrajo de ellas las más bellas esculturas.
Y en todos estos los casos la diferencia no estaba en la piedra, sino en cada uno de los que la usaron.
No existe ninguna piedra en tu camino que no puedas aprovechar para tu propio crecimiento.
Vos haces la diferencia.
1 comentarios:
Gracias Gustavo por el e-mail, asi podemos compartir este tipo de Mensajes.
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Gracias por tu comentario.